¿Juegos o deportes? Entre la tradición y la modernidad

Cuando hablamos del juego, nos referimos a un fenómeno con una finalidad social y lúdica. El juego está presente en la sociedad desde hace siglos y se trata de una herramienta de integración a través la actividad física. Hay que destacar que los juegos son parte de las diferentes culturas, por lo que deberían tener un reconocimiento social que por desgracia actualmente no tienen, ya que los deporte les han ganado terreno.

Muchas veces he escuchado a mi familia hablar con mucha nostalgia de juegos populares que eran conocidos por todos los niños y niñas. Estos juegos se jugaban en la calle, algunas veces sin material y otras, con materiales que realmente no tenían esa finalidad. Actualmente parece que se ha perdido esa esencia, los niños ya no conocen los juegos, aunque no les culpo, ya que el problema es que no se les enseñan.

¿Cómo es posible que ciertos juegos que han tenido tanta importancia en la vida de nuestros abuelos y de nuestros padres no hayan pasado de generación en generación? Parece increíble que en vez de disfrutar viendo una partida de un juego tradicional de nuestra tierra, prefiramos ver un partido de futbol o de cualquier deporte conocido mundialmente. Con esto no estoy criticando que nos guste el fútbol u otro deporte, pero me parece curioso que conozcamos tanto de algunos deportes (incluso seamos expertos en ellos) y sin embargo no sepamos absolutamente nada de nuestra propia tradición.

Desde mi punto de vista, el problema radica en que, como sociedad que vive en un mundo globalizado estamos perdiendo nuestra tradición, lo que nos hace ser quien somos. Pero lo más grave es que ni siquiera en las escuelas se ha hecho algo por mantener estos juegos. La escuela, en vez de enseñarnos acerca de algo tan importante como son los juegos que tiene nuestra cultura, prefiere enseñarnos deportes que probablemente ya conocemos más que de sobra gracias al bombardeo constante que hacen en la tele de estos.

Como futura maestra de Educación Física pretendo que mi alumnado conozca la manera de relacionarse y disfrutar mediante los juegos que ha tenido toda la vida la gente de su alrededor. Me gustaría darle más peso al juego popular que a los deportes de masas, ya que puede ser una gran oportunidad para que muchos niños y niñas conozcan estos juegos que probablemente no les suenen de nada. Por ejemplo, me encantaría darle la importancia que merece a juegos como l'espardenya, el mocador, el canut, el sambori... y por supuesto, a un deporte que tan relevante ha sido en la Comunidad Valenciana y en mi pueblo: la Pilota Valenciana. 

Creo que lo ideal es que los niños, además de disfrutar de deportes que ven en la tele y que son tan conocidos, conozcan un repertorio de juegos que les permitan socializar con su entorno, estén donde estén y tengan material o no tengan.